35 chumbivilcanos piden absolución

Fueron denunciados ademas de secuestrar a Fiscal
Sicuani/ Joel Ayala.

Mas de una treintena de comuneros del distrito de Capacmarca de la provincia de Chumbivilcas buscan justicia en la Sala Mixta de Justicia de Canchis tras ser acusados por el fiscal adjunto de Chumbivilcas de ese entonces Jorge Eduardo Peña Aranibar, por los supuestos delitos de secuestro agravado y contra la vida el cuerpo y la salud en su modalidad de tentativa de homicidio, además de disturbios, violencia y resistencia a la autoridad.
La denuncia la encabeza Braulio Domínguez y a Alex Luna Rodríguez como instigador de los delitos en contra del Estado, la sociedad y el municipio de Capacmarca.

Los hechos se remontan al dos de mayo del 2006 cuando el denunciante fue impedido de cumplir con una diligencia de constatación, incautación y levantamiento del cuerpo del delito optando por retirarse y según su denuncia, a seiscientos metros del lugar fue alcanzado por una turba que lo tildó de corrupto, el denunciante admite que fue impactado por una piedra en la cabeza lanzada por Ricardina Arenas Farfán

El impacto le habría producido el desmayo de dos minutos lo que supuestamente fue aprovechado por los alzados para conducirlo de los brazos hasta la plaza de armas de Capacamarca, ahí la muchedumbre obligo al gobernador Leonardo Carabayo abrir las oficinas, para internarlo a Peña Aranibar, luego la policía lo rescató.

Según la manifestación policial del policía Manuel Jesús Herrera Enciso acompañante del Fiscal, refiere que se dirigieron en combi desde Santo Tomas a Ccapacmarca a realizar la diligencia constatar e incautar el cuerpo del delito. Tras de una fallida reunión de autoridades y vecinos se frustro el dialogo optando el Fiscal por retirarse del lugar, en esa circunstancia aparecieron un grupo de ochenta personas con síntomas de ebriedad que retornaban de un entierro hacia el lugar de las diligencias impidiendo ejecutar la diligencia.

El abogado de los acusados Rubén Angulo indica que sus patrocinados no participaron en ningún momento del atentado contra el fiscal, mas bien fueron otras personas que retornaban del cementerio.

Los acusados exigen la celeridad de la justicia, ya que sus traslados constantes desde Santo Tomas a Sicuani les priva de su natural vida irrogándoles gastos de pasajes, alimentación y abandono de hogares y actividades agropecuarias.